La literatura árabe ha tenido un fuerte impacto en Occidente en los últimos tiempos en los que las traducciones han permitido su divulgación. Varios Premios Goncourt así lo demuestran, uno de los recientes fue el concedido a Kamel Daoud de Argelia por su novela Meursault, caso revisado, en 2015. Tuvo la excelente idea que ahora se pone de moda de realizar una suerte de replica a algún personaje de ficción, sin la densidad que el logró. Volvió a la novela muy conocida de Albert Camus, El extranjero, de 1942, sin aludirla, asumiendo el riesgo de desmerecer frente a su inigualable escritura, con sus contundentes las frases cortas. La historia es por demás perturbadora por tratarse del asesinato de un hombre, sin importar el hecho. Eso es lo que nos hace sentir el personaje Mersault, quien no expresa tampoco otros sentimientos y su vida es vacía y monótona.
Una mujer rota en Antioquía y el caos del temblor
Llegó a Antioquia en 2015 cuando la guerra en Siria hacía imposible la vida. No fue su mejor opción para salir, pero no tenía otra. Su familia había abandonado Líbano a causa de la guerra que se inició en 1975. Dalal Zein el-Dine fue aplastada por uno de los edificios que se vinieron abajo en el primer temblor del 6 de febrero pasado en Turquía y murió junto con tres de sus hijos y un nieto. Apenas tenía 49 años. Fue su hija mayor quien la descubrió debajo de los escombros, y sus dos hermanos permanecían con vida, pero murieron porque no hubo socorristas que les ayudaran.
La heterogeneidad en la cruenta guerra de Yemen: Occidente e Irán en escena
Si algo han dejado claro los conflictos internacionales de las últimas décadas, es que, pese a la retórica de los grandes principios, la política internacional sigue moviéndose de manera primordial por los intereses de Estado y la competencia geopolítica. Ejemplos de esto podemos observarlos en Libia, Siria, Irak y Afganistán, pero es especialmente evidente en el manejo político y mediático que han tenido dos conflictos aun activos, la Guerra de Ucrania y la Guerra Civil de Yemen, poniéndose todos los reflectores en la primera debido a la participación rusa, mientras que la segunda es constantemente relegada a una mera nota curiosa.
Irán, Israel, Rusia… y el despropósito
Mientras Irán es un desastre social internamente por las protestas surgidas por el maltrato a las mujeres y por la respuesta represiva de los ayatolas que ha alcanzado a miles de personas, cientos de muertos y encarcelados por los actos más nimios en cualquier lugar, como enviar a la cárcel a Mohammad y Astiag Haguigui, dos blogueros que se atrevieron a bailar en la calle durante 17 segundos, según el video subido a redes, también participa en el juego internacional.
Israel y la censura de “Farha” en Netflix*
Farha es una niña de 14 años que en la Palestina de 1948 observa el movimiento militar que desembocó en la creación del Estado de Israel. Es lo que deja ver la promoción de la película de la directora jordana Darin J. Sallam, de 2021. Exhibida en la plataforma de Netflix; sin embargo es imposible verla en México y en algunos otros países. Por razones inexplicables, no puede accederse a la película para conocer el relato de lo que los palestinos llaman la Nakba, cuando fueron desplazados de las casas, ciudades y territorios en los que vivían.
Navidad y la prolongación de la guerra en Ucrania*
La navidad se adelantó en Ucrania cuando el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, obsequió al presidente Volodímir Zelenski en su visita a la Casa Blanca, el 21 de diciembre de 2022, un paquete armamentístico por mil 850 millones de dólares. Incluyó los preciados misiles Patriot, que el mandatario estadunidense considera ante todo defensivos y, por si este regalo no fuera suficiente, Nancy Pelosi ofreció de parte del Congreso 45 mil millones de dólares del presupuesto del año 2023 para que Ucrania siga haciendo la guerra. Según el presidente de Rusia, Vladimir Putin, no es el problema, porque calificó a los Patriot como un sistema muy viejo, que no funciona como el nuevo sistema ruso S-300. Y en respuesta a Biden expresó sarcásticamente que lo que él llamó su antídoto tiene también para Putin exclusivamente fines defensivos.
Qatar, futbol y dilema ético
Qatar está en la mira por ser la sede del Campeonato Mundial de Futbol. Será la primera vez que se llevará a cabo en un país del Medio Oriente y de mayoría musulmana. Su territorio se encuentra entre los más pequeños: 11 mil 500 kilómetros cuadrados donde viven 2 millones 500 mil habitantes, de los cuales solo 250 mil son qataríes. El porcentaje más alto de la población es de inmigrantes procedentes principalmente de India, Pakistán y Sri Lanka.
Una buena noticia y otras muy malas para Líbano
Resulta alentador escuchar la noticia del acuerdo alcanzado por Israel y Líbano para fijar sus fronteras marítimas, con la mediación de Amos Hochstein por parte de Estados Unidos. Después de 20 años, desde que en 2000 se supo de los yacimientos de hidrocarburos en el mar profundo en el Mediterráneo oriental, las autoridades de esos países finalmente reconocieron las líneas divisorias, tomando como referencia el prospecto de Cana, supuestamente con ricos yacimientos cuyas dimensiones aún se desconocen.
El incendio de Esmirna que cambió a Asia Menor*
La disputa por el mar Egeo entre Grecia y Turquía marca la agenda de la región por los problemas que encierra la delimitación de las aguas territoriales y del espacio aéreo en un archipiélago compuesto por una gran variedad de islas, muchas de ellas muy pequeñas, involucradas con los países costeros. Por lo demás, el uso de la plataforma continental y el asunto reciente de la explotación de hidrocarburos en el Mediterráneo Oriental ha involucrado a todos ellos.
La guerra de Estados Unidos y el último rey de Irak
El 11 de septiembre de hace 21 años el infierno cayó para demostrar que ningún país es invulnerable, así se tratara de la nación más poderosa del mundo. La arrogancia de Estados Unidos lo llevó a emprender en respuesta la venganza: bombardeó primero Afganistán, hizo una guerra despiadada contra Irak, siguió con Libia, luego Siria y hasta Yemen con el supuesto propósito de acabar con el terrorismo. Al calor de los acontecimientos, lo que se representó con el derribamiento de las Torres Gemelas y la muerte de miles de personas, justificó las acciones y los discursos estadunidenses, sobresaliendo la mentira en el caso de las armas de destrucción masiva en posesión de lrak. La guerra emprendida, sin embargo, excluyó a Arabia Saudita, algo extraño porque fue el país de procedencia de quienes sembraron la destrucción aquel aciago día.